Por amor al cante: Afición desbordante. Israel Fernández tiene la virtud de dominar los cantes, se nota que ha crecido escuchando, investigando y nutriéndose. Con un metal gitano personalísimo, su respeto por el arte no tiene que ver solo con lo que ocurre sobre el escenario, también incluye todos los hábitats del flamenco. Un mundo con muchos referentes añejos. Las peñas son un reducto de compromiso con la música en estos tiempos de marejadas sociales. Lo que allí se mueve es otro aire, el de la escucha, el conocimiento y el respeto.
Noites do Porto | Israel Fernández
Por amor al cante: Afición desbordante. Israel Fernández tiene la virtud de dominar los cantes, se nota que ha crecido escuchando, investigando y nutriéndose. Con un metal gitano personalísimo, su respeto por el arte no tiene que ver solo con lo que ocurre sobre el escenario, también incluye todos los hábitats del flamenco. Un mundo con muchos referentes añejos. Las peñas son un reducto de compromiso con la música en estos tiempos de marejadas sociales. Lo que allí se mueve es otro aire, el de la escucha, el conocimiento y el respeto.